Más de lo mismo

Que un periódico tenga informaciones propias y originales, es hoy, raro. Tiene razón Juan Varela, cuando asegura que:

"Sobra comunicación y relaciones públicas y falta periodismo, información propia, original y diferenciada."

Tener un público más especializado sería lo correcto, pero así el periódico se asemejaría más a una revista ¿no? Siempre se ha hecho, es evidente que ahora no hay excusas, pero lo de la prensa debió ser un boom, pues si no ahora habría temas para dar y vender.

En la actualidad el fin único (para cualquier empresario y alrededor) es "ganar dinero". Esto también puede convivir con otros criterios, es ahí donde se ponen en marcha los valores periodísticos, aquellos que nos han ido vendiendo durante cinco años de licenciatura.

Esas clases casi magistrales en las que te dicen que ser periodista es una forma de vivir, una forma de pensar, de ser,... esto queda mermado y pasa a un segundo escalafón (pero tirando hacia abajo) cuando ves la realidad. Todo evoluciona, sin embargo mis apuntes son idénticos a los de hace 5 años, teniendo en cuenta que el periodismo ha evolucionado mucho. Y todos lo debemos saber ya.



No digo que lo primero no sea cierto, estoy totalmente de acuerdo, pero esto queda relegado cuando ves el panorama y te das cuenta que la realidad no se asemeja a lo pintado en clase. Lo que más me fastidia es que ellos (profesores, algunos doctorados) que tienen posibilidades y conocimientos suficientes no avancen de la mano con el cambio.

Una vez hecha esta aclaración, estaba diciendo que la prensa debe encontrar un público especializado, de esta forma va a ser más fácil satisfacer al lector. Pero esto me recuerda a las revistas, pues el que se compra National Geographic, muy probablemente no se compra Hola.

Ambos lectores tienen muy claro el tipo de producto que quiere consumir. Por el contrario, y en los primeros años de la prensa, lo que se pretendía era dar información generalizada para acudir a un público con intereses variados, pero que encontrase en el periódico la satisfacción de sus inquietudes por estar al día.

Ahora, cuánta gente abre el periódico y va directamente a deportes, o a la cartelera, o a cultura, o a local, es decir el propio público ya están desechando lo que no le agrada. No comprar es una forma de denuncia, es decir que tú periódico ya no me gusta, me aburre, mientras nos sobornan con promociones (el gran descubrimiento de la prensa en el siglo XXI).